Cinefilia: Scarface (1983)
Es innegable que Tony Montana es uno de los personajes más míticos de la historia del cine, derrochando carisma a raudales y poseedor de algunas frases que ya se han convertido en legendarias (“the eyes chico, they never lie”, “who do I trust? me”, ”say goodnight to the bad guy”, etc). La película está dirigida por Brian De Palma, cuenta con un guión escrito por Oliver Stone y está ambientada en el Miami de los ochenta, justo después del conocido éxodo de Mariel, en el cual miles de cubanos abandonaron la isla en busca de nuevas oportunidades en Estados Unidos. Uno de aquellos cubanos exiliados es Tony Montana (Al Pacino), un hombre violento, implacable y con mucha ambición, cuyo único propósito es convertirse en un gangster importante y así poder salir de la pobreza. Desde que se instala en Miami empieza a trabajar para narcotraficantes, siempre en compañía de su gran amigo Manny Rivera (Steven Bauer) con quien comparte su deseo de ser millonario.
Cada plano, escena y momento del film está rodado impecablemente por De Palma, realmente la estética ochentera se impregna en la retina del espectador regalándonos momentos verdaderamente memorables, como la escena de la motosierra o el gran tiroteo final. La duración de la cinta puede llegar a ser algo excesiva, pero es totalmente necesaria ya que recrear el ascenso y caída de Tony Montana requiere de un tiempo considerable para que pueda ser verosímil. Y es que nuestro carismático protagonista comienza desde cero y sin apenas dinero, pero consciente de que si tiene la actitud correcta puede llegar a lo más alto. Es así como se llega a ganar la confianza de uno de los narcotraficantes más ricos de la ciudad, Frank López (Robert Loggia), quien introduce a Tony y Manny en el mundo del hampa. Todo empieza a irle bien hasta que conoce a Elvira (Michelle Pfeiffer), la mujer de Frank, quedando impactado por su belleza por lo que se encapricha con ella al instante, lo cual le traerá muchos problemas a futuro.
Tony Montana se declara a sí mismo como un refugiado político, totalmente en contra del regimen castrista en Cuba y que al llegar a Estados Unidos tiene como ambición conseguir el sueño americano, un hombre que quiere dejar atrás la sombra del comunismo para vivir el juego del capitalismo. Por eso cuando empieza a ganar mucho dinero, lo primero que hace es visitar a su madre y a su hermana Gina (Mary Elizabeth Mastrantonio) que ya llevaban años viviendo en Miami y sin ver a Tony, para demostrarles que había triunfado en la vida. Sin embargo, la reacción de su madre es muy negativa al verle ya que intuye a lo que se ha dedicado y de donde ha sacado el dinero, todo lo contrario a la reacción de su hermana Gina, quién está sumamente feliz por verle de nuevo. Es curioso como evoluciona a partir de aquí la relación entre Gina y Tony, ya que él la sobreprotege demasiado llegando a desarrollar unos celos enfermizos en contra de cualquiera que se acerque a su hermana.
La película fue controversial desde su estreno debido a su excesiva violencia, a su temática relacionada con las drogas y a varias escenas de una crudeza muy realista, por lo que al principio iba a ser estrenada como categoría Rated X, pero tras ciertas modificaciones se logró que fuera clasificada como categoría Rated R, lo que le permitía ser exhibida en una mayor cantidad de salas de cine. No obstante, la crítica la repudió desde un principio debido a la cantidad de violencia mostrada, llegando Brian De Palma a ser nominado a un Razzie Award en la categoría de peor director. No fue hasta varios años más tarde cuando tanto la crítica como el público hicieron de Scarface una película de culto destacando su apuesta radical, su dinamismo y su realismo, llegándose a convertir en un verdadero clásico del cine contemporáneo.
Sin duda alguna, el aspecto más destacado de Scarface es la grandiosa interpretación que hace Al Pacino como Tony Montana. Éste es uno de sus papeles más recordados y no es para menos, ya que durante todo el film está sencillamente impresionante. Sus gestos de mafioso, ese acento cubano tan marcado (imprescindible ver la película en versión original), una mirada implacable demostrando que no le teme a nadie, siempre fumándose un puro habano; son detalles que hacen que hasta pareciera que nació para interpretar a este personaje ya que logra captar toda la esencia del mismo. Apoteósica la última escena de la película donde Montana muestra su soberbia y prepotencia hasta el final, regalándonos una de las frases más conocidas de la historia del cine: say hello to ma' little friend.
La película es un remake de otra también titulada Scarface, dirigida en el año 1932 por Howard Hawks, donde narra la historia de un mafioso italiano llamado Tony Camonte.
Hubo tres candiatos para interpretar a Tony Montana: Bruce Willis, Tom Cruise y Al Pacino. Según Brian De Palma, los tres actores lo hicieron fantástico pero se terminó decantando por Al Pacino debido a su experiencia interpretando a un gangster (Michael Corleone).
Durante muchos años no se supo que era lo que esnifaban los actores en vez de cocaína, hasta que en un documental se reveló que la supuesta coca era talco, lo que en cierta ocasión le provocó a Al Pacino algunos problemas respiratorios.
Para poder escribir bien su guión, Oliver Stone se introdujo entre auténticos narcotraficantes para hacerlo lo más realista posible, teniendo unos cuantos problemas con ciertos narcos por entrometerse demasiado.
En la conocida serie de televisión Breaking Bad, aparecen dos actores que también salen en Scarface. Se trata de Steven Bauer, quien hace de Manny Rivera en Scarface y de Don Eladio en Breaking Bad; y también Mark Margolis quién interpreta a un secuaz de Sosa en Scarface y a Héctor Salamanca en Breaking Bad.
Es una de las películas con más insultos y palabras malsonantes que existen, con una media de un insulto cada 29 segundos.
La mítica mansión de Tony Montana se puede alquilar por 30.000 dólares al mes y se encuentra en Santa Bárbara, California.
Aquí el trailer oficial de la película: